Ayer tuve la suerte de poder encontrar un rato libre para degustar las primeras gotas de miel que chorrean de lo último de Bioware. Como sabréis, Dragon Age 2 llega a las tiendas el próximo 11 de marzo, y viene cargadito de cosas muy buenas... y de algunas malas.
Dragon Age 2 nos narrará la historia de un tipo al que llaman el Campeón, y de momento nadie sabe por qué. Será el personaje protagonista, y tendrá un carisma y una voz propias, convirtiéndolo, por así decirlo, en un Comandante Shepard de espada y brujería: gran luchador, líder nato, amante y aventurero.
Al comenzar la demo, un par de vídeos nos pondrán rápidamente en situación: se trata de una historia paralela a los acontecimientos del título original, que nos sitúa en una aldea arrasada por la Ruina poco después de la caída de Ostagar. Nuestro protagonista (que aún ni es Campeón ni nada) huye de la desgracia junto con su madre y sus dos hermanos, que por cierto, aunque sean sólo aldeanos, claro está, al ser personajes de Bioware, meten hostias como panes, sobretodo nuestro protagonista (obviamente).
Todo esto es narrado por un enano afeitado que le está contando la historia a una mujer ataviada con armadura a la que llaman "La Buscadora" ("The Seeker" en inglés, para los que hayáis leído las novelas de "La Espada de la Verdad" de Terry Goodking o hayáis visto su adaptación televisiva, obviamente os extrañará un poco), y por supuesto, esa conversación no se mantiene por otra cosa si no por el deseo de encontrar al susodicho Campeón para que haga X misión de salvar el mundo.
La forma de contar la historia es un poco extraña y mareante. Quizá sea porque es una demo y necesitaban meter a la gente en situación, pero todo transcurre en una continua sucesión de flashbacks y una alternancia absurda y demasiado frecuente entre videos y cinemáticas de motor gráfico.
Me explico: estáis viendo a dos personajes conversando, y de repente, os dais cuenta de que cuando uno habla, es un vídeo, y cuando lo hace el otro, es una cinemática en tiempo real... ¿sospechoso, verdad? O lo haces todo con cinemáticas, como StarCraft 2, por ejemplo, o todo con vídeos, para ahorrar hardware, que es lo más lógico.
Me explico: estáis viendo a dos personajes conversando, y de repente, os dais cuenta de que cuando uno habla, es un vídeo, y cuando lo hace el otro, es una cinemática en tiempo real... ¿sospechoso, verdad? O lo haces todo con cinemáticas, como StarCraft 2, por ejemplo, o todo con vídeos, para ahorrar hardware, que es lo más lógico.
Y luego tenemos esa extraña sucesión de flashbacks que nos hacen entrar en la historia, pero que resultan un poco mareantes, hasta tal punto en el que nos damos cuenta de que nuestro protagonista llega a una situación de la cual hemos perdido un poco el hilo y está rodeado de un montón de NPC's que apenas conocemos de nada, y con los cuales, por supuesto, no sentimos ningún tipo de empatía en ese momento.
Pero a resumidas cuentas, todo esto nos ayuda a coger el gran argumento del juego (el Campeón perderá a parte de su familia por el camino y hará lo imposible por acabar con la Ruina), y además disfrutaremos de la aparición estelar de un personaje del título original. Yo os lo diría, pero sabéis que no me gusta hacer spoiler, y supongo que ya os imaginaréis quien es, si habéis estado atentos al tema...
Pasemos ahora a temas más serios: jugabilidad. También tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Veamos.
En primer lugar, si os pasó como a mí, que os preocupasteis al leer o escuchar por ahí que la jugabilidad de DA2 iba a estar más orientada a consolas, olvidaros porque es un bulo. El juego es tan manejable en PC como su predecesor, sobretodo en el combate, que es donde está la chicha de todo esto.
Los "pequeños detalles" empiezan a relucir conforme nos centramos en el combate. Las animaciones y los movimientos están muy pero que muy pulidos y mejorados con respecto al primer juego, pero tienen algo extraño: unos movimientos, en ocasiones, demasiado estilizados o exagerados, que a veces llegan a recordar a... (no quería decirlo pero no tengo más remedio)... personajes japoneses. Lo digo en serio. A veces a algunos movimientos especiales sólo les falta que el personaje grite "¡¡¡Hadouken!!!", y a eso le sumamos los simpáticos brincos que dan los Engendros Tenebrosos cuando nos rodean, y resulta hasta cómico (porque a mí me recuerdan un poco a los Masillas de los Power Rangers cuando hacen eso, no se vosotr@s).
Con respecto a las habilidades, la experiencia y la subida de niveles, tenemos grandes cambios en el personaje protagonista, pero prácticamente intacto en los personajes secundarios.
Se ha limitado la personalización del protagonista a sexo, clase (sólo tres, y ni rastro de multi-clase ni cosas de esas que le gustan tanto a los aficionados a D&D) y apariencia externa. ¿Te recuerda esto a alguien en particular, Comandante? A este paso a nuestro Campeón sólo le falta su propia coletilla, a lo "I should go".
En cuanto a la subida de niveles, no ha cambiado mucho, salvo los nuevos árboles de habilidades, que tienen un diseño estético un tanto modernista que los vuelve un poco enrevesados, pero se les coge el tranquillo rápido. En el aspecto técnico, los mas roleros no se van a encontrar nada nuevo: especialización en dos manos, arma y escudo, disciplinas arcanas, etc, etc, etc...
Y diréis, ¿qué hay del inventario? Nada. Sí, nada. Porque resulta que en esta demo el inventario está bloqueado. Al principio dices "bah, que más da, es una demo...", pero no te engañes: después ese pequeño detalle te tocará las narices, y esos cerdos canadienses de Bioware lo hacen a posta: porque cuando te encuentras en la demo con una reluciente hacha a dos manos recién saqueada del cadáver de un pobre Engendro Tenebroso, y descubres que no te la puedes equipar de ninguna de las maneras, te das cuenta de que te entran ganas de que salga ya el juego completo.
Yo personalmente entiendo que las compañías estudien las limitaciones de las demos, pero tratándose de un juego de rol, estamos suprimiendo un elemento muy importante si la intención del experimento es probar el juego. Pero que se le va a hacer...
Y por supuesto, como todo buen juego de Bioware, al margen de las masacres y los inventarios repletos de souvenirs que más quisieras tú encontrar en "El Corte Asia", tenemos las eternas y profundas conversaciones entre los personajes, que con el nuevo enfoque del protagonista se asemejan mucho más a Mass Effect que a otros juegos de la compañía, con su menú radial y todo, 100% Shepard. Normalmente, podremos escoger entre tres respuestas: la bondadosa, la neutral o cínica (para mí la mejor) y la "malvada" (lo pongo entre comillas porque más que malvada, suele ser la respuesta firme, cruel o inflexible). Y por supuesto, como siempre, podremos indagar en los conocimientos de todo NPC con diversas preguntas de todo tipo, que aportarán nuevos datos a nuestro Códice.
Sin embargo, a diferencia de otros juegos, y en similitud con su predecesor, los personajes secundarios evaluarán nuestro comportamiento según su propia personalidad, y no se medirá por puntos de alineamiento ni nada de eso. Es decir, que puedes ganar confianza con un NPC al realizar cierta acción, pero perder con otro al hacer lo mismo, porque piensa de manera diferente, planteándote al final los clásicos dilemas morales que son muy característicos de los juegos de Bioware, y que a mí personalmente me encantan.
Y dejo para el final el apartado gráfico, porque por desgracia es casi de lo menos relevante del juego. Como ya he dicho antes, mejora mucho la animación de los personajes con respecto a su predecesor, pero en general el nivel de detalle es un poco pobre, teniendo en cuenta los grandes logros gráficos que Bioware ha obtenido recientemente y sabiendo que lo pueden hacer mucho mejor. Aunque claro está, os comento esto habiéndolo jugado con DirectX 9, ya que tiene la opción de hacerlo en la versión más reciente, la 11. Si alguien lo ha jugado o lo piensa jugar así, y en consecuencia no está de acuerdo con mi opinión sobre el apartado gráfico, que comente o haga el troll libremente, que para eso estamos. Eso sí, las animaciones faciales, siguen estando un poquito escasas lo mires por donde lo mires. Ahora, en general, es un estilo gráfico bonito y que entra por los ojos, pero que no destaca sobremanera, aunque algunos escenarios están muy logrados en profundidad y tamaño. Una buena experiencia gráfica para el que tenga un buen PC, pero no uno excepcional. Quizá en consolas, obviamente, este apartado deje con sabor a poco.
Y nada más. En resumen, a pesar de todos estos "detalles" que me he visto en la obligación de aclarar, Dragon Age 2 no pinta que sea ni por asomo un mal juego. A nivel de historia estará más que a la altura de su predecesor, y aportará grandes dosis de acción, conversaciones y quebraderos de cabeza, que los amantes del rol agradecemos eternamente a Bioware desde hace mucho tiempo. A eso le añadimos las ingentes hordas de Engendros Tenebrosos que tendremos que masacrar (y que llegan a ser desesperantes pero terriblemente divertidas) y el par de ogros y mercenarios de turno, y tenemos justo lo que todo buen aficionado al rol quiere y necesita.
Pero a nivel de innovación gráfica y tecnológica se han quedado un poquito sosos, y quizás el tema de "innovaciones en la jugabilidad" lo han interpretado un poco mal y lo han convertido en "limitaciones", sobretodo en lo que respecta al personaje protagonista, del cual veremos si esta conversión "a lo Shepard", implementada en el rol más absoluto, dará o no resultado.
También descubriréis, al final de la demo, que podréis obtener objetos especiales si adquirís la versión final. Pero claro está, sólo son simples reclamos comerciales (como lo del inventario) puestos para atraer a los amantes de los DLC's y el contenido adicional. También me llamó especialmente la atención uno de los eslogan de la campaña publicitaria del juego: "Lucha como un espartano". ¿A qué vino eso? Yo intenté reconocer la voz de Gerard Butler en alguno de los personajes, pero mis indagaciones iban por camino erróneo...
Reclamos publicitarios como éste tan original: ¿lo habíais visto todo después de la armadura de DAO en Mass Effect ? Pues no, porque ahora llega... ¡la armadura de Isaac Clarke de Dead Space! Si es que cuando los encargados de publicidad de EA se quiebran la almendra...
Nada más. Yo os pondría encantado la dirección de descarga de la demo, pero en los tiempos que corren no me puedo permitir el lujo de hacerle publicidad gratis a nadie. Eso eso todo.
En cuanto a la subida de niveles, no ha cambiado mucho, salvo los nuevos árboles de habilidades, que tienen un diseño estético un tanto modernista que los vuelve un poco enrevesados, pero se les coge el tranquillo rápido. En el aspecto técnico, los mas roleros no se van a encontrar nada nuevo: especialización en dos manos, arma y escudo, disciplinas arcanas, etc, etc, etc...
Y diréis, ¿qué hay del inventario? Nada. Sí, nada. Porque resulta que en esta demo el inventario está bloqueado. Al principio dices "bah, que más da, es una demo...", pero no te engañes: después ese pequeño detalle te tocará las narices, y esos cerdos canadienses de Bioware lo hacen a posta: porque cuando te encuentras en la demo con una reluciente hacha a dos manos recién saqueada del cadáver de un pobre Engendro Tenebroso, y descubres que no te la puedes equipar de ninguna de las maneras, te das cuenta de que te entran ganas de que salga ya el juego completo.
Yo personalmente entiendo que las compañías estudien las limitaciones de las demos, pero tratándose de un juego de rol, estamos suprimiendo un elemento muy importante si la intención del experimento es probar el juego. Pero que se le va a hacer...
Y por supuesto, como todo buen juego de Bioware, al margen de las masacres y los inventarios repletos de souvenirs que más quisieras tú encontrar en "El Corte Asia", tenemos las eternas y profundas conversaciones entre los personajes, que con el nuevo enfoque del protagonista se asemejan mucho más a Mass Effect que a otros juegos de la compañía, con su menú radial y todo, 100% Shepard. Normalmente, podremos escoger entre tres respuestas: la bondadosa, la neutral o cínica (para mí la mejor) y la "malvada" (lo pongo entre comillas porque más que malvada, suele ser la respuesta firme, cruel o inflexible). Y por supuesto, como siempre, podremos indagar en los conocimientos de todo NPC con diversas preguntas de todo tipo, que aportarán nuevos datos a nuestro Códice.
Sin embargo, a diferencia de otros juegos, y en similitud con su predecesor, los personajes secundarios evaluarán nuestro comportamiento según su propia personalidad, y no se medirá por puntos de alineamiento ni nada de eso. Es decir, que puedes ganar confianza con un NPC al realizar cierta acción, pero perder con otro al hacer lo mismo, porque piensa de manera diferente, planteándote al final los clásicos dilemas morales que son muy característicos de los juegos de Bioware, y que a mí personalmente me encantan.
Y dejo para el final el apartado gráfico, porque por desgracia es casi de lo menos relevante del juego. Como ya he dicho antes, mejora mucho la animación de los personajes con respecto a su predecesor, pero en general el nivel de detalle es un poco pobre, teniendo en cuenta los grandes logros gráficos que Bioware ha obtenido recientemente y sabiendo que lo pueden hacer mucho mejor. Aunque claro está, os comento esto habiéndolo jugado con DirectX 9, ya que tiene la opción de hacerlo en la versión más reciente, la 11. Si alguien lo ha jugado o lo piensa jugar así, y en consecuencia no está de acuerdo con mi opinión sobre el apartado gráfico, que comente o haga el troll libremente, que para eso estamos. Eso sí, las animaciones faciales, siguen estando un poquito escasas lo mires por donde lo mires. Ahora, en general, es un estilo gráfico bonito y que entra por los ojos, pero que no destaca sobremanera, aunque algunos escenarios están muy logrados en profundidad y tamaño. Una buena experiencia gráfica para el que tenga un buen PC, pero no uno excepcional. Quizá en consolas, obviamente, este apartado deje con sabor a poco.
Y nada más. En resumen, a pesar de todos estos "detalles" que me he visto en la obligación de aclarar, Dragon Age 2 no pinta que sea ni por asomo un mal juego. A nivel de historia estará más que a la altura de su predecesor, y aportará grandes dosis de acción, conversaciones y quebraderos de cabeza, que los amantes del rol agradecemos eternamente a Bioware desde hace mucho tiempo. A eso le añadimos las ingentes hordas de Engendros Tenebrosos que tendremos que masacrar (y que llegan a ser desesperantes pero terriblemente divertidas) y el par de ogros y mercenarios de turno, y tenemos justo lo que todo buen aficionado al rol quiere y necesita.
Pero a nivel de innovación gráfica y tecnológica se han quedado un poquito sosos, y quizás el tema de "innovaciones en la jugabilidad" lo han interpretado un poco mal y lo han convertido en "limitaciones", sobretodo en lo que respecta al personaje protagonista, del cual veremos si esta conversión "a lo Shepard", implementada en el rol más absoluto, dará o no resultado.
También descubriréis, al final de la demo, que podréis obtener objetos especiales si adquirís la versión final. Pero claro está, sólo son simples reclamos comerciales (como lo del inventario) puestos para atraer a los amantes de los DLC's y el contenido adicional. También me llamó especialmente la atención uno de los eslogan de la campaña publicitaria del juego: "Lucha como un espartano". ¿A qué vino eso? Yo intenté reconocer la voz de Gerard Butler en alguno de los personajes, pero mis indagaciones iban por camino erróneo...
Reclamos publicitarios como éste tan original: ¿lo habíais visto todo después de la armadura de DAO en Mass Effect ? Pues no, porque ahora llega... ¡la armadura de Isaac Clarke de Dead Space! Si es que cuando los encargados de publicidad de EA se quiebran la almendra...
Nada más. Yo os pondría encantado la dirección de descarga de la demo, pero en los tiempos que corren no me puedo permitir el lujo de hacerle publicidad gratis a nadie. Eso eso todo.
Saludos mutantes.
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